Ha terminado la primera fase del complicado calendario del Eurobasket 2013 y el grupo C ha sido liderado por España con 4 victorias y 1 derrota. Se puede decir que el balance de la actuación española, por ahora, es correcto. Se enfrentaba, en teoría, a dos partidos complicados el del debut, frente a Croacia, que no mereció tal calificativo por la autodestrucción croata (una característica muy propia últimamente de los equipos de Repesa) y contra Eslovenia, la única derrota, en el que el factor ambiente, por ser el adversario el anfitrión, le pesó demasiado a algunos jugadores y, posiblemente, al seleccionador Orenga, por primera vez exigidos al máximo, una buena experiencia si se sacan las conclusiones adecuadas.
Estaba claro que en Selección española había mucha diferencia entre los jugadores que últimamente habían estado en el equipo nacional con papeles destacados y los que se incorporaban en esta convocatoria, que está aprendiendo a competir. Todo el peso del juego ha recaído sobre Marc, Calderón, Rudy, Ricky y Sergio Rodríguez, los demás bien por su nuevo rol en el equipo (Claver, Llull, etc.) o por su inexperiencia (Rey, Aguilar) no han dado un paso adelante y han aportado significatívamente salvo en momentos muy puntuales.
Es imprescindible de cara a lo que viene sumar algún jugador más a los elementos decisivos, sobre todo en el juego interior demasiado dependiente de Marc. Claver, forzado al puesto de cuatro, no está desarrollando un juego que le haga merecedor de tantos minutos, Aguilar está demasiado nervioso para tener un rendimiento ofensivo normal y Rey va a tener pocos minutos por la presencia imprescindible de Marc. Quizás Gabriel debería tener un papel más importante como cuatro, su supuesta inferioridad física parece que le lastra para mantener el buen juego defensivo del equipo, pero su juego interior ofensivo es muchísimo mejor que el de sus compañeros, que prácticamente no saben jugar de espaldas, y también es más sólido en el tiro exterior, en ataque habría una amenaza más.
De paso se resolvería parte de una disfunción en la rotación, es curioso que en demasiados minutos jugamos con un base como escolta, un escolta como alero y un alero como ala-pivot. Puede que sea necesario pero así es difícil sacar el mejor rendimiento de jugadores que no pueden explotar lo mejor de sus características. Especial mérito tiene Calderón que no se verá en otro marrón mayor que jugar como escolta en lo que le resta de carrera y lo está aceptando sin rechistar y con un rendimiento bastante bueno en el tiro de tres puntos, sin ningún especialista real.
A partir del jueves la dificultad y la transcendencia de cada partido crece. Los rivales en la próxima fase serán Grecia que recuperará a Spanoulis al máximo rendimiento y que es una de las favoritas al título. Italia proclamada renacida (¿Antes de tiempo?) desde una larga y negra época y de la que, como de esta España, se desconoce su potencial real y la sorpresa Finlandia, a la que pocos tienen en cuenta, pero que puede dar algún susto todavía. Veremos, por ahora se progresa adecuadamente.
Es imprescindible de cara a lo que viene sumar algún jugador más a los elementos decisivos, sobre todo en el juego interior demasiado dependiente de Marc. Claver, forzado al puesto de cuatro, no está desarrollando un juego que le haga merecedor de tantos minutos, Aguilar está demasiado nervioso para tener un rendimiento ofensivo normal y Rey va a tener pocos minutos por la presencia imprescindible de Marc. Quizás Gabriel debería tener un papel más importante como cuatro, su supuesta inferioridad física parece que le lastra para mantener el buen juego defensivo del equipo, pero su juego interior ofensivo es muchísimo mejor que el de sus compañeros, que prácticamente no saben jugar de espaldas, y también es más sólido en el tiro exterior, en ataque habría una amenaza más.
De paso se resolvería parte de una disfunción en la rotación, es curioso que en demasiados minutos jugamos con un base como escolta, un escolta como alero y un alero como ala-pivot. Puede que sea necesario pero así es difícil sacar el mejor rendimiento de jugadores que no pueden explotar lo mejor de sus características. Especial mérito tiene Calderón que no se verá en otro marrón mayor que jugar como escolta en lo que le resta de carrera y lo está aceptando sin rechistar y con un rendimiento bastante bueno en el tiro de tres puntos, sin ningún especialista real.
A partir del jueves la dificultad y la transcendencia de cada partido crece. Los rivales en la próxima fase serán Grecia que recuperará a Spanoulis al máximo rendimiento y que es una de las favoritas al título. Italia proclamada renacida (¿Antes de tiempo?) desde una larga y negra época y de la que, como de esta España, se desconoce su potencial real y la sorpresa Finlandia, a la que pocos tienen en cuenta, pero que puede dar algún susto todavía. Veremos, por ahora se progresa adecuadamente.
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