lunes, 24 de junio de 2013

THIAGO ALCÁNTARA Y EL MANCHESTER UNITED: CUÉNTAME COMO PASO

"Del Barça nadie se va por dinero. O te vas porque te echan o porque no tienes minutos."
Radiografía de la situación de Thiago por Guardiola

El destino final de Thiago Alcántara es la comidilla de todos los veranos en el F.C. Barcelona. Este año más porque es un reflejo del anquilosamiento de la parte deportiva del club. La inercia funciona un tiempo luego se pierde velocidad, por el rozamiento. Y la dirección deportiva, con Zubizarreta al frente, tiene roces por todas partes. La posible marcha de Thiago al Manchester United puede ser un descarrilamiento en toda regla.
Cuando todos se querían

Algo iba mal desde diciembre, se perdió el control sobre la gestión de la plantilla y las renovaciones o marchas, se veía venir que iba a pasar algo gordo, algo muy gordo. De repente Valdés dijo que se marchaba, sin ton ni son parecía, Zubi había hecho la típica salida en falso de sus tiempos de portero y el balón había entrado por toda la escuadra. Conclusión: Un guardameta titular transitorio (Sea el propio Valdés u otro), un suplente renovado año tras año cuando debería estar jubilado desde hacía un par de ellos y sin relevo a la vista.
Después llegó lo de Abidal y su renovación-no renovación, mareando la perdiz, ofreciendo un cargo institucional, un asunto que se había tratado desde el principio desde la vertiente sentimental y el Barça es más que un club y se cerró desde la vertiente profesional y el Barça es una empresa, es decir incoherentemente. 
Todo se clarifica aún más.
Y por fín llegó la bomba en forma de tres goles en la final del Europeo Sub´21, los podían haber marcado Morata o Tello pero fueron obra de Thiago Alcantara. Seguramente que a Rosell se le indigestó la merienda esa tarde de junio en la que el joven mediapunta, que tenía que jugar el 60% de los partidos de la temporada para mantener su cláusula de rescisión en 90 millones y al no hacerlo se rebajó automáticamente a 18, se coronó como gran triunfador y se puso en el mercado con un cartel aun más enorme que decía Crack. 
Era difícil de justificar, y lo sigue siendo, por qué se accedió a la rebaja de la clausula y porque se aceptó un riesgo que no se calculó correctamente. Es cierto que Thiago estuvo un tiempo lesionado durante la temporada, pero también es cierto que cuando estuvo en condiciones y otros como Xavi o Busquets no lo estaban ellos siguieron jugando prácticamente a la carta y él en el banquillo, sabiendo Tito lo que podía ocurrir. La falta de confianza de Tito fue clamorosa, si no jugó en esas condiciones sería difícil que lo hiciera con todo el plantel al 100%. Puede que todavía no esté al nivel de Xavi, Iniesta o Cesc pero es un jugador muy válido para partidos más transcendentales, como demostró Guardiola, de esos en los que se ha quedado virgen este año. El constante "hablaremos con Thiago para tratar que se quede" es un reconocimiento explícito del fracaso de la dirección deportiva.
La línea de sucesión en el centro del campo se puede romper. La coherencia y la garantía de mantener una forma de jugar durante más de una década que dibujó Guardiola con Xavi-Iniesta-Cesc-Thiago-... no existirá. Si se marcha habrá que buscar un sustituto que pueda llegar a ser lo que Thiago ya es, sin ninguna garantía de conseguirlo, en la cantera no se ve por el momento. Esperemos que, por el bien del Barça dentro de 10 años, sentados los tres en una agradable terraza, Rosell no le tenga que preguntar a Tito y a Zubi "Contadme como paso ¿Por qué se marchó Thiago?". Con Formula V al fondo.

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