Todo es de color de rosa después de la victoria de España ante una Uruguay muy mediocre sin centro del campo y con defensas para salir del paso. Aún así ha sido un partido muy interesante para sacar conclusiones de dogmas de fe de la era Del Bosque que se han demostrado totalmente falsos.
La milonga del mediocentro.
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| Hay que elegir entre los dos. |
Había que jugar con doble pivote. Era irrenunciable, el dúo Busquets-Xabi Alonso se repetía partido tras partido a pesar de que muchos decíamos que se doblaba un puesto innecesariamente y se empujaba a Xavi Hernández a posiciones en las que no podía sacar rendimiento a sus cualidades, jugando de espaldas y entrando muy poco en contacto con el balón. Del Bosque nunca ha sido un hombre del que destacara su capacidad de decisión, si había un problema le rodeaba, buscaba la solución más política, la menos conflictiva, pocas veces la mejor. Ayer con un solo mediocentro España jugó como hacía cinco años que no lo hacía, desde la Eurocopa 2008 en la que Senna barría el medio campo y Xabi le daba el relevo desde el banquillo cuando el físico bajaba. Hay que decidir Busquets o Xabi, Xabi o Xavi. El juego del equipo lo agradecerá.
La milonga del capitán.
Al final jugó Casillas, los méritos de Valdés durante la ausencia del capitán y su mejor estado de forma no han servido de nada. Del Bosque se asustó, dejar a Iker en el banquillo le hubiera puesto a ojos de los amigos del trazo grueso a la altura de Mourinho, no reparó que no era la misma situación porque Diego López no tiene la categoría de Valdés y puede que ni siquiera tenga la de Reina. No hablaremos de Adán. Una vez más rodeando los problemas.
Bonus track: La milonga del falso nueve.
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| Un diez de los que no hay muchos |
Fue retrasar 10 metros la posición de Cesc, ponerle un delantero centro, en esta caso Soldado por delante con Pedro revoloteando por aquí y por allí y el falso nueve de España se convirtió en el gran diez de España. La virtudes de Cesc son la llegada, la asociación y el pase interior. Si está en el área no llega, si juega de espaldas a la puerta no tiene pase interior y el efecto de sus asociaciones, vertical con la portería de cara, es mínimo. Ayer España, volvió a atacar, tocando verticalmente y buena culpa de ello la tuvo Cesc ayudando al jefe Iniesta, el mejor del partido. Esperemos que Del Bosque y Tito hayan tomado nota. Falso nueve solo hay uno se llama Messi y lo puede ser porque es el mejor del Mundo. Cesc es el 10.
Extraordinario análisis pero si lo leen mis amigos del Madrid te ponen a caer de un burro. ¿Del Bosque políticamente correcto? Anda ya, no me jodas. Y si aún duda les dice a los jugadores que decidan ellos. jajajaja.
ResponderEliminarGracias Luismi. Tus amigos del Madrid deben ser un poco extremistas. Porque está claro su prioridad es no ofender.
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