Todo iba muy bien pero... la debacle estaba a la vuelta de la esquina. Como siempre ahora se buscan culpables, cuando ya no tiene remedio. Como en todas las derrotas nadie reclama su paternidad aunque la mayoría se la endiñan a Orenga. Puede que sea el responsable más visible pero no el único.
Los jugadores.
Más de una década después ayer, en el momento más complicado, tuvimos a Gasol y Navarro. Como siempre. Más de una década después metieron más de la mitad de los puntos del equipo en un partido en el que ninguno de los dos tuvo una actuación brillante. Más de una década después ningún otro jugador dio un paso adelante y dijo estoy con vosotros. En Eslovenia se trató de dar una especie de relevo: Marc, Rudy, Ricky debían demostrar que son presente y futuro. No fue así, los dos primeros se quedaron a medias, el segundo pasó de principal a marginal. En este torneo tampoco se ha producido el advenimiento del nuevo líder. Ni rastro. Más de una década después el maná se ha terminado.
Y el futuro no es desolador porque hay mimbres, lo que no será tampoco es tan deslumbrante. Lucharemos por las medallas, puede que ocasionalmente ganemos algún torneo europeo pero a medio plazo, por lo menos, no asistiremos a un dominio como el de los últimos años, es muy posible que nunca más. Seguiremos en la aristocracia pero como el hidalgo que pasa estrecheces para llegar a fin de mes. El puesto de pivot, quitando a los NBA (incluido Mirotic) es un erial, el de alero un terreno ignoto. De bases vamos sobrados para unos años (incluyendo a Llull) y de escoltas tiraremos sin estrecheces mientras que no haya lesiones.
Es decir volvemos a los 80´s y 90´s.
El Entrenador
Parece el más evidente culpable. Se reúne el mejor equipo de la Historia y se da el mando a un entrenador con una experiencia testimonial (y nada exitosa, por ser amable) en ACB, un desempeño correcto en categorías inferiores (Que no son la élite y generalmente quedan muy lejos de ella) y un torneo previo que dejó bien a las claras las limitaciones de un gestor que no estaba preparado para el trabajo. Ni aquí ni en Eslovenia los jugadores han mirado al banquillo y han encontrado un entrenador firme al que agarrarse ni, por supuesto, ninguna solución.
En todos los torneos hay uno o dos partidos perros en los que no sale nada, se ganan por oficio de los jugadores y por lo que se aporta desde fuera con rotaciones, cambios tácticos, cambios de estado de ánimo. Todo eso está fuera del control de Orenga. Es un aprendiz cuya carrera, mediocre hasta ahora, ha terminado. La rotación sin sentido que ha planteado en este torneo ha llevado al colapso de un equipo no perfecto pero sí con muchos recursos inexplorados y sobre todo con un planteamiento incongruente.
Se juega a dominar desde el interior, lo que conlleva un planteamiento lento, y se encomienda la dirección a dos bases que se caracterizan por el vértigo y el juego en transición, se deja al base mejor dotado para el juego posicional reducido a la tercera opción en el puesto de escolta. Ayer ante el mayor baño reboteador que se recuerda se prescinde de un señor al que le caen los balones en las manos por colocación, intensidad y hambre.
Su gestión de minutos ha sido horrenda. Todo el banquillo menos Llull, el sexto hombre, y Calderón, por su forma buenrrollista de ver la vida, estaba incómodo. El que más Felipe Reyes. Toda la vida cogiendo rebotes y el último ha sido su perdición, castigado sin un solo minuto, aún cuando era evidente que se necesitaba su presencia en la pista. Es verdad que ha elegido mal el momento de rajar, es cierto que posiblemente no hubiera cambiado nada aunque hubiera jugador. Lo irrefutable es que no se merecía volver cuando se había ido para vivir el ostracismo. Todo lo demás ya se habló anteriormente.
El Presidente.
Una generación trajo la gloria al baloncesto patrio. Consigues un torneo que servirá de homenaje a unos jugadores irrepetibles y el destino te pone en disposición de conseguir una victoria que parecía imposible pero que las bajas de los rivales (no solo USA) hacen factible.
Durante años todos te han dicho que eres muy listo y que sabes mucho. Tus jugadores son los mejores, tu eres el mejor. ¿Para que buscar un entrenador que también lo sea? ¿Para que tentar a un número uno para que dirija al equipo al completo en este Mundobasket aún debiendo pasar el purgatorio, que luego no fue tan grave, de Eslovenia? Es cierto que la esperpética normativa ACB de no permitir que el seleccionador entrene durante la temporada a un equipo de la Liga que lo que menos tienen son jugadores españoles reduce mucho el número de candidatos pero Pepe Sáez eligió no dar a los jugadores un referente, eligió que alguien acompañara a los jugadores en la preparación y los partidos. Al fin y al cabo desde Pepu, cesado porque no era posible la convivencia entre el Método Pepu y el Método FEB que a la sazón era el Método Pepe, pasaron Aito, con su mano de hierro que no sentó muy bien, y Scariolo, cuya presunta sofisticación tampoco fue muy llevadera. Se optó por tanto por la nada. Y nada se obtuvo.
Pepe nos prometió la luna para el 2014: Mirotic e Ibaka, un equipo de leyenda y un torneo inolvidablemente triunfal. No ha conseguido nada de todo eso. Durante años se ha hecho la vista gorda cuando, no un entrenador, sino toda una Federación ha tenido un comportamiento cuasi mafioso con jugadores a los que se marginaba de forma incomprensible por alzar mínimamente la voz (Suárez y, ahora, Felipe), se ha utilizado todo el poder en la prensa entregada para demonizar a otros (Mirotic), se han soslayado sus fracasos en el cumplimiento de promesas imposibles (otra vez Mirotic) y se ha tomado descarado partido en sus luchas de poder (Con el Presidente del COE, por ejemplo). Todo ello sepultado por las victorias que no eran suyas pero que la propaganda hacía que parecíeran una consecuencia inevitable de su gestión, nunca faltaba la entrevista amiga para ensalzar las virtudes del Método Pepe. Ya no hay victorias. Es hora de marchar.
Fue bonito. Hay gente que mira a Río, no sé si se llegará porque hay que clasificarse en el Eurobasket 2015 y a ver con qué jugadores vamos y no sé si merece la pena intentar con estos jugadores volar a Brasil. Navarro, Reyes, Calderón y Pau Gasol nos han dado todo y tenían la oportunidad de darnos más aún este Mundial, no ha sido posible, es mejor una retirada a tiempo. No es conveniente otra Barcelona´92. Hay que preservar los mitos. Los más grandes mitos.
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