El Bernabeu pitó a Casillas y el Bernabeu fue injusto con Casillas ayer.
Habrá ganas por parte de la afición de pitar al mejor portero de la Historia del Real Madrid por agravios pasados pero la acción que desató la ira del público no fue responsabilidad de Iker, igual que tampoco fue responsable de los goles que recibió en San Sebastián.
Casillas no tiene la culpa de que Coentrao no salte ante un leve bloqueo de Raúl García, que Cristiano no llegue en su ayuda y que el balón llegue sin oposición a la cabeza de Tiago ante un fallo garrafal de Benzema, que con su posición defensiva es imposible que haga su labor correctamente, mientras Ramos y Mandzukic impiden cualquier movimiento del portero para atacar el balón.
Soy de los que piensan que hace varios años Casillas dejó de ser el mejor portero de España y que tras la llegada de Diego López o de Keylor Navas al Real Madrid su titularidad no tiene por qué ser indiscutible.
Pero también de los que piensan que a Casillas se le están imputando errores que no son suyos.
Quizás ya no es el mejor portero del Mundo, puede que no sea, a día de hoy, un gran portero. Es un buen portero, sin duda, tan bueno como su competencia las últimas temporada, pero cada vez se está haciendo más pequeño, peor jugador y todo porque se le están cobrando deudas a destiempo y haciendo que sufra una pasión injusta e irracional. Es una forma rara de intentar ayudar a tu equipo, puede que las más rara que yo haya visto.
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