El Real Madrid buscó y encontró en Bale este verano un escudero para Cristiano con sus mismas características y sus mismos defectos. El Barcelona hizo lo propio con Messi y Neymar.
Hoy los dos mejores jugadores del mundo están "no operativos". Cristiano por una extraña lesión, tratada mal y tarde, en el momento más decisivo de la temporada. Messi con la cabeza en otra parte, no se sabe si en su nuevo contrato, en el Mundial o simplemente en Manchester o París, por poner dos ejemplos.
Hoy los dos mejores jugadores del mundo están "no operativos". Cristiano por una extraña lesión, tratada mal y tarde, en el momento más decisivo de la temporada. Messi con la cabeza en otra parte, no se sabe si en su nuevo contrato, en el Mundial o simplemente en Manchester o París, por poner dos ejemplos.
El caso es que los niños tienen la oportunidad de hacerse hombres en este partido porque en ellos está el foco ahora. Es la hora de acercar su valor al precio que se pagó por ellos, cualquiera que fuera.
Neymar fue el único que dio la cara ante el Atleti y en Granada con sus defectos ante el gol, apunta, dispara pero no acierta, fue de largo el más peligroso y constante de los blaugranas. Como en tantas finales de los últimos años el Barça se presenta, además de con una tendencia negativa, con la defensa cogida con pinzas. Mascherano es el único fijo en el centro de la defensa y descartado Piqué y con la duda de Bartra puede que Adriano tenga que jugar de central. El Barça solo puede ganar este partido desde el ataque porque va a ser muy vulnerable, más todavía, en defensa.
Bale con su falta de otro registro que no sea correr y golear debe tomar la mayor parte de la responsabilidad en el ataque, Benzema no le recriminará en el campo que no le pase el balón e Isco, que parece el titular en sustitución de Cristiano puede ser su mejor aliado por su visión de juego. El galés está ante su gran oportunidad de desquitarse por su falta de presencia en los grandes partidos que ha tenido que jugar su equipo en esta temporada. El Real Madrid por su parte necesita encontrar un centro del campo sólido después del naufragio de esa línea en Dortmund, no solo para este partido sino de cara a las semifinales de Champions frente al Bayern.
Nunca hay favoritos claros en un Barça-Real Madrid, hoy tampoco aunque sea porque los dos equipos están repletos de dudas. Uno porque ya no será nunca lo que fue y otro porque está en transición desde lo que era hasta lo que quiere ser. En manos de los segundos espadas están.
Nunca hay favoritos claros en un Barça-Real Madrid, hoy tampoco aunque sea porque los dos equipos están repletos de dudas. Uno porque ya no será nunca lo que fue y otro porque está en transición desde lo que era hasta lo que quiere ser. En manos de los segundos espadas están.
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