F.C. BAYERN MUNICH: LA ÚLTIMA OBRA DE JUPP HEYNCKES

Alineación del Bayern Munich contra el Valencia.

Heynckes, un entrenador poco valorado.

Si hay un entrenador menospreciado en la historia reciente del Real Madrid es Jupp Heynckes. En la temporada 1997/1998, con el alemán al mando, los blancos rompieron décadas de sequía en su competición fetiche y se alzaron con la Champions League frente a la Juventus de Zidane y Del Piero. Durante toda esa temporada Heynckes tuvo que lidiar con el fantasma de su antecesor Capello, que se había despedido a la francesa para volver al A.C. Milan, donde fracasó y que se considera a sí mismo como el verdadero padre de la séptima del Madrid, y con una plantilla desmadrada, la quinta de los Ferraris (Suker, Mijatovic, Seedorf, etc), que después de la marcha del centurión italiano y de quedar en manos de un hombre con una pose menos estricta como es el alemán optó por la relajación y por fiar todo a ganar la Copa de Europa dejando aparcada la Liga donde quedó en cuarta posición. En cualquier caso, a pesar del gran triunfo, Heynckes fue sustituido a final de temporada por Guus Hiddink. Entonces en el Real Madrid el entrenador no era tan poderoso como ahora.

El último menosprecio que ha tenido que soportar son las eternas referencias a su sustituto en el banquillo del Bayern Pep Guardiola  y la supuesta ayuda que le pediría desde el sorteo que le emparejó en semifinales con el F.C. Barcelona en una falta de respeto total a un gran entrenador.

Ribery, el mejor jugador del Bayern

Lo cierto es que, en la que parece su última temporada como entrenador en la élite, quiere repetir título 15 años después al frente de una maquinaria más disciplinada y con el mismo talento que en la ocasión en la que ganó la competición. Después de las ultimas finales del Bayern Munich  en el 2010 contra el Inter (Con otro maldito como el holandés Louis Van Gaal en el banquillo) y en 2012 contra el Chelsea y en su propio estadio, el Allianz Arena, parece que la columna vertebral del equipo ha llegado a su punto justo de madurez física, técnica y táctica y ha vuelto a dominar la Bundesliga después de dos años de sequía y de sufrir al Borussia Dortmund, rival en la otra semifinal del Real Madrid. El Bayern lleva 12 años sin ganar la Champions, desde que derrotó al Valencia C.F. en la tanda de penaltis y quiere remediarlo.

Ojo, mirad al retrovisor, llega Müller

Los fichajes del central brasileño Dante, el medio español Javi Martínez y los delanteros Mandzukic (15 goles en la Bundesliga) y Shaquiri, entre otros, han mejorado bastante la plantilla, ya de por sí muy buena, y han dado más opciones al técnico. 

Opciones que no eran pocas pues contaba con varios jugadores de talla mundial como Neuer,  sin duda entre los cinco mejores porteros del mundo, quizás más arriba ahora que Casillas no juega, Lahm que domina en ataque y en defensa el lateral derecho como antes el izquierdo, el eterno (y queda para rato) Schweinsteiger organizando en el centro del campo, para la línea de mediapuntas cuentan con su jugador de más calidad el francés Ribery, con el desborde y la velocidad en la parte positiva y excesivo individualismo en la negativa de Robben y con el olfato goleador desde segunda línea de Thomas Müller (12 goles en la Bundesliga) De alternativa en la delantera el tanque de última generación Mario Gómez (10 goles en la Bundesliga) o el no menos contundente en lo físico Pizarro. La superioridad en el juego aéreo del Bayern con estos dos jugadores y alguno más es infinita respecto al F.C. Barcelona.

Sin duda es el rival más fuerte al que se ha enfrentado en esta edición de Champions League el F.C. Barcelona, y posiblemente será el más fuerte al que se enfrentará pase o no a la final de la competición. En cualquier caso el asunto no está tan favorable al Bayern como parecía hace 15 días. En el transcurso de las dos últimas semanas el Barça ha recuperado al "Cid" Messi y se ha dado descanso del resto de  titulares,  sobre todo Piqué y Busquets, muy fundidos físicamente por las pocas rotaciones que se llevaron a cabo en la alineación en la mitad de la temporada. La ligera superioridad técnica del Barça y Messi contra la neta superioridad física del Bayern harán que el equilibrio puede ser mayor del esperado.