CHAMPIONS LEAGUE 1/8 FINAL: El BARÇA DEBE VOLVER A ATACAR

Derrota de la armada invencible, pintura de Philippe-Jacques de Loutherbourg (1796)

El descalabro total en Champions League de los equipos españoles está muy cerca, algo impensable hace quince días. Ninguno de nuestros cuatro representantes ha conseguido un resultado positivo. El Real Madrid que empató a uno contra el Manchester United y es el que más vivo está de todos, quién lo habría dicho y depende de sus grandes jugadores. El Valencia perdió 1-2 contra el PSG, transmitiendo sensaciones muy negativas y escasa competitividad. El Malaga se puede dar con un canto en los dientes por recibir solo un gol en Oporto en un ejercicio de impotencia ofensiva. Pero el que mayor desastre ha sufrido, y en el que me voy a centrar,  ha sido el F.C. Barcelona que, contra todo pronóstico, ha salido de Milán con dos goles en contra y sin haber disparado a puerta con cierto peligro. ¿Se avecina una derrota completa de la armada invencible?.

Falta de profundidad, el toque en su contra

El peor parado de la ida de los octavos de final de la Champions League  ha sido el F.C. Barcelona. Desde un tiempo a esta parte, justo desde que se estableció como "once de gala" aquel en el que juegan juntos Cesc-Busquets-Xavi en el centro del campo e Iniesta de cuarto mediocampista escorado a la banda izquierda, el Barça hace gala de una exasperante falta de profundidad. Llevo algunos meses diciendo que sin Pedro, el Barça y la Selección española jugarían un eterno rondo de fútbol sin porterías, el canario es el único de los atacantes que aporta desmarque y juego a la espalda del contrario permitiendo el pase en profundidad, los demás medios y delanteros, incluido otro que podría hacerlo como es Messi, piden siempre el balón al pie. Por lo demás la sorpresa queda en manos de Jordi Alba, gran temporada, y el lateral derecho de turno.

Pedro el único que corre al hueco

No es que no haya otras opciones en la plantilla culé para aportar esa profundidad, ahí están Thiago, el más vertical de los centrocampistas del Barça, Tello que se atreve a regatear y lo logra, algo que actualmente en el once inicial solo hacen Messi e Iniesta cada vez más lejos del área, o Villa, baja en Milán pero ignorado durante toda la temporada. Sin embargo se sigue confiando inexplicablemente en Alexis Sánchez que como ya dije genera muchos más problemas, presentes y futuros, que soluciones  y que ni marca goles ni se va de nadie. Jugar  los partidos importantes con trece jugadores, los titulares más Mascherano y Alexis, se está convirtiendo en una costumbre y no está dando buen rendimiento y además puede hacer que alguno de los suplentes desconecte por falta de confianza del cuerpo técnico cuando muchos serán necesarios en el futuro.

La mencionada falta de desborde y pase hacia la portería contraria hace que el juego del Barça desde el parón de Navidad sea una sucesión interminable de lentos pases horizontales sin ninguna intención salvo la de conservar el balón. Dice Del Bosque que la Selección se defiende con la posesión del balón, si esto es cierto, podemos decir que el Barça últimamente lo único que hace es defenderse y de mala manera ya que en los dos partidos más importantes de la temporada hasta ahora la semifinal de Copa del Rey contra el Real Madrid y los octavos de Champions contra el Milán ha utilizado el mismo planteamiento conservando el balón por encima de todo y ha recibido tres goles.

Cesc: Un problema "político"

La alineación de Cesc: Una cuestión "política"

Y el problema, como he dicho antes, surge desde la alineación por una cuestión "política": la necesidad de encontrar un sitio a Cesc en el once. Desde su fichaje ha sido un enigma dentro de un misterio su integración en el sistema de juego, Guardiola lo intentó jugando con tres defensas y el cuatro como delantero centro y Tito lo está intentando jugando con cuatro centrocampistas con Cesc acompañando a Xavi. Ninguno de las dos opciones ha dado los resultados esperados. Hay tomar una decisión dura y difícil y "sacrificar" a uno de los pequeños para volver a los orígenes. Jugar con Xavi, Iniesta y Cesc puede ser un recurso para un partido o tramo de partido determinado no el plan maestro o incluso en partidos poco exigentes jugar los tres y dejar a Busquets descansar. Solo pueden quedar dos. Se puede elegir entre la capacidad de organizar de Xavi, el desborde y pase de Iniesta o la llegada y sorpresa de Cesc pero la alineación debe contar dos extremos que busquen los espacios y el hueco que deja el falso nueve y que den opciones de pase vertical a los medios.

Autonomía para Roura.

Roura debe tomar mando en plaza

Esto nos lleva al problema del entrenador. Tito Vilanova, por su enfermedad, está en Nueva York. El Club optó, para mí con buen criterio, por no sustituirle y dejar el equipo de manera interina en manos de Jordi Roura. Está bien, ya lo he dicho, pero Roura se está limitando a ser un mero acompañante de los jugadores, no a ser un entrenador, supongo que no querrá tocar nada para no romperlo pero algunas veces, como ayer en Milán es necesaria la intervención del entrenador para cambiar el rumbo del partido con un intercambio de posiciones, con otro sistema, o haciendo sustituciones. Nada de eso se produjo. Alexis salió para dar empuje al ataque cuando es el más inofensivo de los jugadores del Barça y Mascherano cuando no hubo más remedio porque Puyol no podía por lesión. Si es cierto que todo lo controla Tito desde EEUU, si es cierto que él dice lo que hay que hacer y cuando, creo que Tito se está equivocando. Debe decidir quien está en el campo, quien está con los jugadores todos los días, quien entrena con ellos... Roura debe tener autonomía para hacer su F.C. Barcelona, no creo que cambie mucho la filosofía pero a lo mejor se le quita el miedo a cambiar los partidos y se siente por fin importante y no un simple intermediario.El Barça necesita también necesita un líder en el banquillo.

Volver a los orígenes: Atacar

En definitiva está bien tener más posesión, está bien tener paciencia, está bien defenderse con la posesión en lugar de correr. Pero además hay que utilizar la posesión para atacar al contrario, sin esa agresividad el toque pierde todo su sentido y deja al equipo defendiéndose continuamente. Para ganar y dar la vuelta a la eliminatoria de Champions, pasar a la final de Copa y sentenciar aún más la Liga el Barça debe volver a los orígenes, debe volver a atacar.