Empieza la tormenta de clásicos
anual, tres en poco más de un mes. Y llega en un buen momento deportivo para
los dos equipos. El Barcelona, más regular a lo largo del año, y después de la
minicrisis que supuso perder un partido, lo que no había ocurrido en toda la temporada,
se presenta con la Liga muy encarrilada, con 11 puntos de diferencia con el
Atlético de Madrid y un cruce en Champions League muy asequible frente al AC
Milan. El Real Madrid bastante recuperado después de un inicio de Liga decepcionante con
la Liga perdida en diciembre, algo que no se recuerda, y una eliminatoria que
se presume muy equilibrada frente al Manchester United. La Copa, competición en
la que hay que ganar tres partidos para ser campeón, se presenta como su baza
más asequible.
A pesar de que está manteniendo
un perfil bajo, Mourinho puede estallar en cualquier momento de este mes de clásicos
en otro de sus arrebatos incendiarios por cualquier nimio motivo y enterrar la
tranquilidad con la que se estaba desarrollando la vida en la Casa Blanca en
los últimos tiempos, hasta que habló Florentino para defender a su entrenador
de las portadas de Marca y fue contestado por Sara Carbonero como portavoz del
vestuario en el que algunos habían quedado como mentirosos y dejando clara la
guerra “soterrada” entre entrenadores y jugadores.
A los problemas internos se suman
las bajas de Casillas, el de la baja forma y detonante de la últimas crisis,
Ramos, Pepe y la más relativa de Coentrao (según quién lo mire aunque fijo en
estos partidos) que va a lastrar la capacidad defensiva del Real Madrid y su
capacidad para mantener la portería a cero. En cuanto a la portería Adán desde su inexperiencia y con
los pocos partidos que ha jugado a alto nivel y Diego López por su inactividad esta
temporada relegado en el Sevilla por Palop, son relevos correctos pero de medianas garantías. En los últimos clásicos
anteriores las bajas en defensa eran en el Barcelona, hay que recordar a Keita o
Adriano jugando de centrales y los problemas que eso causó ante una
delantera del potencial del Real Madrid. Además falta Di Maria siempre
importante para poner en aprietos a Alves.
A favor de los blancos está la
velocidad de crucero que han adquirido después de Navidad cuando ha ganado cómodamente
sus partidos y que Cristiano está
como un tiro físicamente, en forma de cara al gol y liderando al equipo en cada
partido. Me da que no va a ser suficiente.
El Barcelona de Tito Vilanova,
tratándose de su enfermedad, y Roura, que ha ganado todos los partidos en los que ha sustituido a Tito como primer entrenador, va a llegar al momento en que se ve si hay
un buen equipo, seguro, o un gran equipo, posible. Hasta ahora de máximo nivel
ha tenido dos partidos, la ida de la Liga contra el Real Madrid (2-2) y la
vuelta contra el Málaga en la Copa (2-4), ahora con la fase final de la
Champions League y esta eliminatoria de Copa se constatará lo que ha crecido
este equipo que no alcanzó el nivel necesario en las dos competiciones
principales el año pasado y si puede ser comparado con el de temporadas
anteriores más triunfales.
Con el once de gala menos Valdés,
al que se echará de menos a lo largo de la eliminatoria como siempre,
recuperados Piqué y Cesc para la causa después de un año decepcionante, y sin
bajas reseñables en la plantilla no hay excusas para sacar un buen resultado en
la ida, además Messi, Xavi e Iniesta
están imparables, jugando y haciendo jugar. El Barça tiene muchos factores a
favor y es claro favorito en la eliminatoria.
Igual son los partidos que menos me gustan de todo el año. Habrá que estar atento al número de faltas e interrupciones. Por los demás prefiero ver un Stoke - Wigan. Seguro
ResponderEliminarEres un friki del fútbol Iluminado, seguro que no le ves.
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